viernes, 22 de abril de 2011

Dulce castigo

Pecado Original, poema, Carlos GuzmánPECADO
PECADO ORIGINAL

Se habló del fruto prohibido,
no del amor entre los dos ...
Si ellos fuéramos nosotros
¡qué dulce sería el castïgo!

Ellos tomaron el fruto,
eran dóciles de amor,
mira que fue ante el disgusto
amoroso de su Creador.

Hoy le besamos la mano a
la encarnación de la moral,
que besan el suelo lejäno

con una moral cristiandad...
¡si somos, mi Dios, hermanos
del pecado y la divinidäd!