miércoles, 18 de julio de 2012
TU ESTELA
Ya no quieres que te vea,
lejos quieres mi mirada;
si es tu rostro cual estela
que percibo en tu mirada.
En el campo de mis amöres
veo tu gracil simpleza,
compitiendo con las flores
y deshojando asperezas.
Son virtudes que llenaron
tus manos ilusionadas...
como versos te impulsaron
suspirando enamorada.
Hoy por hoy te sueño bella,
complacido y de corazön...
Si ví en tí la dulce estrella
deslumbrándome la razön.
...Y no quieres que te vea
(luce seria tu mirada)
si tus ojos son la estela
de los versos que pisaba.
Carlos Guzmán
SEGUIR SOÑANDO
Hoy quiero soñarte
(verte linda siempre)
Sentir como amarte
y sentir tu vientre.
Es noche de ensueño
que al final no agota;
soñar ser tu dueño
es lo que me importa.
Soñar que eres mía
(y tus labios besär
con la luz del día).
¡No hay que despertar!
(¡No quiero ver el dia!)
Quiero amarte .. y esperär.
Carlos Guzmán
GLORIA PARA TI
POR MÁS DIVINA
Con tu semblante tierno y comprensivo
es que iluminas mi alma al despertar.
En tus brazos calor, amor y abrigo,
como el mar en calma al poderte amar.
Son tus virtudes que llevo conmigo;
recordarte y más tarde al recordar,
que he vivido sintiéndome querido
con tu luz ... en cada mañana al despertär
Hoy que vago entre rosas al recordartë,
con el fruto de amor que en mí engendraste,
llevo recuerdos ... para siempre amarte.
Madre divina, que conmigo empezastë,
colmando el mundo de singular arte...
pues con ternura y amor ... me entregaste.
Carlos Guzmán
MAMÁ
¡ Mi... mi mejor verso de amor
lo canté nomás comencé hablär;
no para tildarme escritor,
sino por llamarle ... mamá !
Carlos Guzmán
ANTE EL ESPEJO
Espejo para acariciar mis penas
de semblante grávido e inquisidor;
hoy que laceras mi alma y me condenas,
también percibo tus reclamos de amor.
Perturbas la tranquilidad de mi alma;
entrando con profundidad mis ojos,
y juzgas extraer de mí esa calma
que tiene a mi alma sumergida en dolor.
Si hoy arrepentido ante ti me postro,
como un triste devoto ante su altar;
quiero enseñarte este día mi rostro
al romper mis penas y malestar.
Hoy que veo en tí divina condena,
mi alma bruta y torcida al despertar ...
deshace en mí esas arraigadas penas:
juzga mi vida para poder descansär.
Carlos Guzmán
Suscribirse a:
Entradas (Atom)